El Ser Superior impartiendo su bendición, a nosotros, pobres mortales
Por una vez tengo que dar la razón a Emilio Butragueño, aunque con carácter retroactivo, y es que Florentino Pérez es, realmente, un Ser Superior.Sólo alguien que sea considerado como tal puede ser capaz de haber unido a todo el valencianismo, que no se caracteriza precisamente por su unión o por remar todos en la misma dirección.
Ejemplos de disensión dentro del valencianismo hay todos los que queramos. Desde partidarios y detractores de Paco Roig a partidarios y detractores de Unai Emery, pasando por Pedro Cortés, Héctor Cúper, Jaume "el Bonico" Ortí (su famoso "muchas noches bonicos" lo he oído yo personalmente), Rafa Benítez, Quique, Carboni, Albelda, Ayala, Aimar... y cualquiera que haya estado remotamente cerca del murciélago del escudo, que es precisamente el que más cohesión genera junto con Bernardo España, "Españeta", el sempiterno, e idolatrado por la afición, utillero.
Pero fue llegar Florentino a la presidencia del Madrid, allá por el año 2000 y empezar a ser visto como una suerte de enemigo común, y es que nada une más que un enemigo. Aunque la verdadera carta fundacional del odio del valencianismo hacia el Ser Superior viene con el frustrado fichaje de Mendieta por el Real Madrid. Los tejemanejes para marear al jugador y que se terminara rebelando contra el club y solicitando públicamente su salida hacia el Real Madrid, hizo que viéramos la catadura de este Ser Superior hecho carne mortal, que no dudaba en entrar a saco donde fuera con tal de obtener lo que quería. El problema es que no contaba con tener enfrente a Manuel Llorente, que si algo sabe hacer es negociar y tiene pinta de ser ateo hasta las cachas.
Florentino Pérez, con la displicencia propia de quien se sabe superior al tratar con gente de provincias que le debe la correspondiente pleitesía, no repara en azuzar a toda su cohorte mediática (la mal llamada prensa nacional, que mejor debería llamarse prensa madrileña) encabezada por el diario Marca y secundada gozosamente (en estos casos no hay rivalidad) por AS y todo el grupo PRISA, para malmeter en el club de origen del objetivo deseado. Lo mismo les da que sea español como extranjero: el Ser Superior se ha fijado en él y deben acceder a su deseo, a ser posible gratis, pero se asume que podría tener un coste, por supuesto, bajo.
¿Y si te niegas? Pues empiezas a ser la encarnación del Anticristo en la tierra, llegando a decir (esta vez el diario El Mundo, que es del mismo grupo mediático que Marca) que el jugador está secuestrado por su club. Y eso es de lo más sutil que se dice. Sólo las mentiras darían para otro post completo.
Una vez puesta en marcha la Brunete mediática, el objetivo es que el jugador se rebele y salga implorando al Ser Superior que le fiche, porque es su sueño desde pequeño y porque no se le ocurre otro fin para sus días que el postrarse, día sí día también, a sus pies. Y lo mejor de todo es que a veces lo consiguen. El club, ante la petición de su jugador, acaba cediendo. Todos los clubes acaban cediendo. Es lo que tiene enfrentarse a un Ser Superior.
¿Todos? no, un club de una pequeña aldea a las orillas del Mediterráneo resiste la invasión del Imperio. Ya lo ha hecho dos veces anteriormente, en el anterior reinado del Ser Superior, y ésta parece que puede ser la tercera, y aunque el Valencia terminara vendiendo a Villa, sería llenando bien el bolsillo y con la victoria moral de hacer pasar por el aro al Ser Superior, por mucho que lo quisieran vender como un nuevo triunfo del nuevo profeta.
Lo mejor de todo, es que la mejor época del club de la aldea a orillas del Mediterráneo, se produjo precisamente durante el anterior advenimiento, así que los insurgentes no pueden por menos que frotarse las manos... Con lo que mola darle en los morros a Florentino, desde luego que no pensamos en quedarnos con las ganas.