sábado, 19 de noviembre de 2011

Reflexionando

Hoy es Jornada de Reflexión y yo, como soy muy obediente, me he puesto a reflexionar. Y después de un par de horas de paciente y profunda reflexión he llegado a una conclusión: voy a sentarme en el water antes de ducharme en vez de hacerlo después porque es más higiénico.

Porque vamos a ver; si alguien, a estas alturas de la película, después de 15 días de campaña electoral y 3 años y medio de precampaña aún no tiene claro a quien votar es que es idiota. Y si no lo tiene claro tampoco lo va a tener por estar 24 horas sin, en teoría, oír hablar de política en los medios de comunicación. Bueno, en los medios audiovisuales porque en los escritos, que hábilmente cerraron sus ediciones antes de las 00:00, se pueden leer todas las opiniones políticas que se hicieron ayer.

En fin, que lo de la Jornada de Reflexión es un anacronismo de la época en la que todos éramos unos analfabetos democráticos que no sabíamos nada acerca de que era eso de las urnas y tal pero que ahora no tiene ningún sentido salvo el dar excusas a algunos políticos (que al parecer la consideran sacrosanta) para que vociferen un poco más criticando a los que, a su parecer, la violan.

Por todo esto yo pediría a los del gobierno que viene que hagan el favor de reformar la Ley Electoral de una vez y suprimir la Jornada de Reflexión. Porque lo de la circunscripción única y la reforma completa o supresión del Senado es ya mucho pedir, ¿no?.

3 comentarios:

Txomin Goitibera dijo...

Bueno, la jornada sirve para que al menos por un día, se dejen de dar la brasa, que ya les vale. Merece la pena aunque sólo sea por eso

Mariano sí quiere cambiar la ley electoral, pero para reducir el número de diputados afianzando más el bipartidismo. Para ahorrar pasta dice. Mas pasta se ahorraría suprimiendo el senado, ¿no?

El que ya NO apaga las subestaciones dijo...

Nopordiossss.

Otro día más sin poder poner la tele y la radio noooooooo

Con lo bonito que quedó ayer el telediario de la primera, lleno de blandiblup de color de rosa.

El que ya NO apaga las subestaciones dijo...

¿Mariano? ¿Mariano Mariano? ¡Qué gran humorista! No hay torero que le llegue a la suela de los zapatos.

Lo que hace falta no es cambiar el pompón del pastel que minimizaba las probabilidades de violencia política en los años 70, cuando había pistoleros y policías matando gente.

Lo imprescindible es darles con el pastel en la cara para que no se lo repartan. Que haya democracia de una vez por todas.

Especialmente democracia económica, donde todos decidamos qué producir, en lugar de los grandes empresarios, garrulos decimonónicos que hasta mediados de los 90 no empezaron a diversificar la reinversión de sus beneficios en algo que no fuese lo mismo que en los años 50 y 60.

Y así nos va.