Todavía no salgo de mi asombro. Hace menos de un minuto, Angels Barceló acaba de dar la noticia en Hora 25, de la Cadena SER. Andrés Montes, de 53 años, periodista deportivo que hasta hace poco era la voz de las retransmisiones de fútbol y baloncesto en La Sexta, ha sido encontrado muerto en su domicilio del madrileño barrio de Chamberí por uno de sus familiares, sin que se conozcan de momento las causas de la muerte.
Recuerdo a Andrés Montes de sus retransmisiones en Antena 3 de radio, hace muchos años, cuando ya marcaba un estilo propio pero mucho más comedido de lo que era últimamente. Fue a partir de 1996, retransmitiendo los partidos de la NBA en Canal + con Antoni Damiel ("A. Daimiel, crónica en rosa de la NBA" como él le bautizó) y Santiago Segurola cuando de verdad empezó a marcar distancias y un nuevo estilo en las retransmisiones deportivas. Las onomatopeyas, los apodos y la emoción con la que transmitía los partidos, marcaron un antes y un después en la televisión española. A partir de ahí, nos acostumbramos tanto a ese estilo y lo asociamos de tal manera a la NBA que, por lo menos en mi caso, cuando veo un partido retransmitido de otra forma, parece que me falta algo.
A partir de 2006, fichó por La Sexta y llegó su mayor índice de popularidad al retransmitir el fútbol. El estilo seguía siendo el mismo, pero aplicado al fútbol, donde el que había marcado estilo había sido José Angel De la Casa, que se limitaba a narrar, sin apenas altibajos. Este mismo verano ha sido el encargado de llevarnos la emoción del europeo de baloncesto, al grito de "el oro no está en Moscú, está en Polonia", acompañado por Juanma López Iturriaga, Epi y José Manuel Calderón, o "Mr catering", apodo que le puso él mismo.
Amado y odiado a partes iguales, no se puede discutir que marcó un estilo propio, y posiblemente haya cambiado el estilo narrativo del deporte televisado. Le echaremos de menos. Descanse en paz.
Recuerdo a Andrés Montes de sus retransmisiones en Antena 3 de radio, hace muchos años, cuando ya marcaba un estilo propio pero mucho más comedido de lo que era últimamente. Fue a partir de 1996, retransmitiendo los partidos de la NBA en Canal + con Antoni Damiel ("A. Daimiel, crónica en rosa de la NBA" como él le bautizó) y Santiago Segurola cuando de verdad empezó a marcar distancias y un nuevo estilo en las retransmisiones deportivas. Las onomatopeyas, los apodos y la emoción con la que transmitía los partidos, marcaron un antes y un después en la televisión española. A partir de ahí, nos acostumbramos tanto a ese estilo y lo asociamos de tal manera a la NBA que, por lo menos en mi caso, cuando veo un partido retransmitido de otra forma, parece que me falta algo.
A partir de 2006, fichó por La Sexta y llegó su mayor índice de popularidad al retransmitir el fútbol. El estilo seguía siendo el mismo, pero aplicado al fútbol, donde el que había marcado estilo había sido José Angel De la Casa, que se limitaba a narrar, sin apenas altibajos. Este mismo verano ha sido el encargado de llevarnos la emoción del europeo de baloncesto, al grito de "el oro no está en Moscú, está en Polonia", acompañado por Juanma López Iturriaga, Epi y José Manuel Calderón, o "Mr catering", apodo que le puso él mismo.
Amado y odiado a partes iguales, no se puede discutir que marcó un estilo propio, y posiblemente haya cambiado el estilo narrativo del deporte televisado. Le echaremos de menos. Descanse en paz.
1 comentario:
Grande Andres Montes!!!
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